Radica en Guadalajara desde 1983. Es autor de siete libros de poesía: Escrúpulo del minutero (Secretaría de Cultura de Jalisco, 1994), La sal de los lucientes (Fondo Editorial Tierra Adentro, 1997), Contraventura (filodecaballos/CONACULTA-Fonca, 2003), Arrayán (Bonobos, 2009), Las bellas destrucciones (Mano Santa Editores, 2011), Cerdos tatuados (inédito) y Hacia días felices simples rastros (Mano Santa Editores, 2020). Poemas suyos han sido incluidos en las antologías El manantial latente