(Zacapu, Michoacán; 1996). Es egresado de la licenciatura en Humanidades de la Universidad de Guadalajara. En 2017 realizó una estancia académica semestral en la Facultad de Filología Hispánica de la Universidad de Almería, España, por parte del programa PEA de su institución. Participó en el Tercer Encuentro de Jóvenes Escritores de Morelia (2019). Su crónica Los estrechos caminos obtuvo el segundo lugar del Concurso Número 50 de la revista Punto de Partida de la Universidad Nacional Autónoma de México (2019). Actualmente se desempeña como productor en Radio UdeG.
POEMAS
Los Silencios de Dios
Nunca hablamos de literatura, nunca hablamos del temor constante
pero ambos soñamos con islas olvidadas,
de los paisajes breves de tus ojos
y de mi absurda preocupación por todo espacio no recorrido.
Un día conversamos sobre los silencios de Dios:
coincidimos en que aquella niña nos entregó el mundo en su mirada
mientras el caos brotaba en la estación de autobuses;
y, sin embargo, la vida le responderá con la tempestad
de quien yace sólo en el último rayo de luz
– Quisiera vivir en los ojos de mi madre – me dije, y
estremecerme con la esperanza de su tiempo.
….
Todavía no me acostumbro a mirar cara al cielo
mientras enfrento la dificultad que implica acarrear tu memoria.
A veces la vida se nos presenta como diversos pasados conjugados,
cuya proyección se difumina
y a veces, pero solo a veces,
su forma se asemeja más a un pañuelo blanco.
La inmortalidad es convertirse en un adjetivo
Nadie sabe cuál es el hábitat del abandono
pero todos guardamos espacios vetados de significados
……………………………quiero decir heridas suaves,
……………………………quiero decir el contorno de las sombras sobre nuestros labios
……………………………quiero decir una sala vacía
y su irreparable acecho perpetuo
entonces hay días en que podemos ser cicatrices
de una tarde, un repositorio de anhelos,
discursos gastados o un mapa de lunares
sobre nuestra piel.
Hace tiempo que dejé mi nombre en la tierra,
(como quien cree fielmente en la migración del sentido)
con la ingenuidad de un posible retorno;
desde ese momento no he sido más que el constante desvelo de mis ojos.
Suelo arrancarme el melodrama escribiendo,
pese a ello, continúo siendo inasible para mis manos
para el viento
y para el desgastado arrullo de mi voz
La inmortalidad es convertirse en un adjetivo, leo en
el periódico,
y salgo al mundo para ganarme ese derecho.
Bordes de un suspiro
Al posar 1 encontramos un manoderotero 2, la sonrisa del sabroso paseo de las yemas sobre el sieglo 3.
Un juego de pies descalzos acaeçien 4. en el fuego;
todo soliloquio es una cortadura.
Nunca encontré sençido 5 el laçerío 6, ça nol 7 llega de feridal 8 sino en sonos 9, como las olas y su fuerza frágil, de ahí que el mar sea un nomnado 10 cuya cuita 11 nace deçibido 12
Cómo crió 13 la vida mientras el omne 14. ríe