Autor

Luis Daniel Pulido

Luis Daniel Pulido (Tuxtla Gutiérrez, Chiapas). Ha publicado los libros "Pollito Card", UNICAH; "Prohibido degollar patos", Editorial Almada Broders; "Nunca sonrías a Optimus Prime", Espejitos de papel Editores, Puerto Rico; "Bruce Wayne y la generación X (un concierto de rock para Chulpan Khamatova)" y "Baxter Memories (vida y obra de Víctor Von Doom)", Tifón editorial.

Columnas, Qué triste no ser el Hombre Araña,

Tirios y troyanos en tiempos del COVID-19

Mientras “caminamos” por las arenas movedizas y expansionistas del Covid-19, su mosaico territorial colorea al país. Y en algún punto, nosotros, confinados, seguimos los acontecimientos con esos colores sobre nuestras cabezas. Hemos entregado, queramos o no, nuestros destinos a los azares del periodismo, a esos cómplices-rémoras de la política, del mesianismo de quienes representan las instituciones en México, de los encargados ahora de restablecer con sus fuerzas materiales, sociales y sobre todo: morales, al país.

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Roberto Bernal: un extraño en la multitud

Las hojas fingían la postura pálida de la tarde. Pero la luz las traspasaba: torcían la dirección de su movimiento. Atrás de ellas circulaba el aire del huerto, mientras imaginaba el caer del mango, su aproximación verde de primavera, y las lluvias que harían su cáscara amarilla.

Roberto Bernal

 La fotografía contemporánea –como la poesía– sujeta su libertad al protagonismo: historias breves y particulares de fama. Y es regla, eso me

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El otro Spider Man (el origen de Chincho)

Para Gina

Dicen que tengo los ojos grandes, y me gusta tener los ojos grandes. Mi nombre, no importa; decirlo me provoca ansiedad pues quisiera ser otro, pero eso sí, conservar mis ojos grandes ya que eso me permite estar alerta. No creo en nadie, sólo en mi mamá y dicen que sí, tengo hermanos mayores que yo, pero no los extraño y mucho menos los quiero.

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Casa de citas, el placer de la lectura y mi agradecimiento con el autor

Héctor es un lector que no pregona el discurso exaltado y congestionado del sabihondo, renuncia a esa camisa de fuerza y propone libertades lectoras, que al igual que él cedamos al viaje propuesto por los libros y los móviles inesperados: las citas literarias, las canciones inolvidables, los caminos que se entrecruzan. Libertades que apuestan por la generosidad y la memoria.